Happy Slaves

El estrés y la ansiedad en el trabajo están muy presentes en el día a día de las personas jóvenes y cada vez más. De hecho, en una encuesta realizada por la plataforma Shakers, el 50% de quienes realizaron el cuestionario respondieron “no” a la pregunta “Cuando llega el domingo, ¿tienes ganas de empezar la semana?” y el 11% contestó “ni de coña”.

Dicho cuestionario fue cumplimentado por personas empleadas de entre 25 y 35 años y entre los argumentos más repetidos para explicar esta falta de ganas por comenzar una nueva semana en el ámbito laboral, encontramos:

1. La falta de motivación
2. Los horarios rígidos
3. La presencialidad obligada
4. La sensación de dar la vida por el trabajo

Todas estas ideas son un resumen del sentimiento que tienen las personas trabajadoras hacia sus puestos de trabajo, lo cual demuestra que nos encontramos inmersos en un cambio generacional que afecta al empleo y en una nueva era del trabajo. Dentro de esa evolución ha surgido el término “happy slaves” del que hablaremos en profundidad a continuación.

¿Qué significa el término «Happy Slaves»?

Cuando hablamos de “happy slaves” nos referimos a las personas trabajadoras que se encuentran atadas a un puesto de trabajo tradicional con horarios fijos e inamovibles, que se desarrollan en la oficina sin opción al teletrabajo, y que ofrecen una vida profesional organizada de manera rígida e impuesta por las empresas.

Estos “esclavos contemporáneos”, como se definirían en castellano, son aquellas personas empleadas que no cambian de puesto de trabajo porque esperan un aumento de sueldo cada cierto tiempo y están convencidos de que llegarán a ser “managers”, aunque a veces ni siquiera se replantean la idea de cambiar de empresa u ocupación.

Del 56% de personas encuestadas que cambiarían de trabajo, un 36% no lo hace por no perder la estabilidad que se les ofrece, el 17% decide no aventurarse en un nuevo empleo por la preocupación por el dinero, y el 16% se quedan en sus puestos de empleo por miedo a la incertidumbre. Todo esto provoca que muchas personas trabajadoras pasen por episodios de estrés y ansiedad relacionados con su vida laboral.

Tanto es así que el 70% de quienes completaron el cuestionario de Shakers admitieron haberlo sufrido durante el año anterior, y el 80% conocían a alguien cercano que había sentido algo parecido. Los “esclavos felices” siguen desempeñando sus funciones en un sistema con el que no están de acuerdo, e incluso llega a aburrirles, y esto acaba afectando a su salud tanto física como mental.

Estos datos son reveladores y muestran una gran insatisfacción laboral, sobre todo si tenemos en cuenta que nos encontramos en la era de la tecnología, en la que cada vez son más los que deciden desempeñar sus funciones laborales desde la comodidad de sus casas, con horarios flexibles y la posibilidad de gestionar su día a día. La mayoría de las personas trabajadoras jóvenes de nuestro país anhelan liberar su talento y es de eso de lo que trata nuestro siguiente apartado.

El talento liberado o talento libre

¿Cuál es la solución para todas esas personas trabajadoras que admiten que cambiarían de trabajo, pero no lo hacen por miedo a lo desconocido o por mantener una estabilidad? Cada vez son más las personas que están convencidas de que la alternativa a los puestos de trabajo tradicionales está en el talento liberado o talento libre. El 58% de quienes completaron la encuesta afirmaron que querrían ser freelance y la mayoría no dan el paso por desconocimiento, pero además un 30% confirma que tienen miedo a no saber gestionar la incertidumbre.

El talento liberado o talento libre hace referencia al cambio que se está produciendo en la actualidad y que hace que muchas personas trabajadoras, sobre todo jóvenes, se lancen a la aventura de trabajar de forma “independiente” sin un espacio fijo, sin horarios cerrados y sin una estructura prescrita.

La nueva era del trabajo, en la que ya estamos inmersos, aboga por valorar el talento por encima de todo lo demás. Con este método de trabajo, las horas muertas pasarían a ser historia y se premiaría a las personas empleadas por los objetivos conseguidos y la calidad de su trabajo, en lugar de cuantificar el tiempo que pasan trabajando o el número de tareas desarrolladas.

¿Son los “freeworkers” o “trabajadores libres” el futuro en el ámbito laboral? Eso está por ver… lo que está claro es que las necesidades de las personas trabajadoras están cambiando y el mundo laboral con ellas.

Si quieres diferenciar a los “happy slaves” y te interesa la incorporación de “trabajadores libres” en tu empresa, no dudes en contactar con el equipo de profesionales de Grupo Clave. Nuestros 30 años de experiencia en selección nos avalan.

Selección & Headhunting