Síndrome del impostor: causas y cómo afecta en la vida laboral de las personas

Acumular logros académicos y éxitos durante la carrera profesional es el objetivo de muchas personas trabajadoras que lo consideran un motivo de orgullo y alegría. Sin embargo, son muchos quienes, al alcanzarlo, tienen un sentimiento de culpa por no considerarse merecedores de todo lo conseguido con su propio esfuerzo y trabajo. Esa sensación es conocida como el síndrome del impostor y se manifiesta en 7 de cada 10 personas alguna vez en la vida, según la doctora Valerie Young.

¡Sigue leyendo para saber más sobre este este síndrome y cuáles son sus causas!

¿Qué es el síndrome del impostor?

El “síndrome del impostor”, también conocido como “fenómeno del impostor” o “síndrome de fraude” es un problema psicológico que quien lo sufre es incapaz de reconocer sus propios logros y valía personal. Se trata de una incapacidad manifiesta en reconocer o asimilar el éxito, normalmente en el ámbito profesional.

Las personas que lo padecen piensan que no merecen los reconocimientos obtenidos a base de su desempeño laboral y, viven con la sensación constante de ser un fraude para su entorno y con la incapacidad de valorar sus méritos propios.

Algunos datos importantes sobre este síndrome son:

• Aparece, fundamentalmente, en personas de alto rendimiento.
• Es más habitual en mujeres, los hombres son un 18% menos propensos a sufrir el fenómeno del impostor.
• El 86% de los jóvenes de entre 18 y 34 años reconocen no merecer su puesto de trabajo.
• Más de la mitad de los profesionales del sector tecnológico han pasado por este síndrome.
• La mayoría de las personas que lo sufren ven afectada de alguna manera su carrera profesional, tanto en bajos sueldos, como en menos promociones dentro de la empresa o dificultad para encontrar empleo
• Está relacionado con un perfeccionismo excesivo.

Causas del síndrome del impostor

Las causas que producen este fenómeno no están del todo claras, ya que cada profesional tiene una personalidad diferente, pero entre las más comunes podemos encontrar:

1. Dinámicas familiares durante la infancia: Nos referimos a cuando hay una persona en el ámbito familiar que acapara más logros o es considerado como la persona “inteligente”. También se da cuando uno de los padres es muy exitoso y la persona que lo sufre se siente como la “oveja negra”.
2. Estereotipos sociales y diferencias salariales: Aunque este síndrome no tiene género, las presiones sociales como la de ser madre o la brecha salarial afectan a las personas trabajadoras y puede considerarse una causa de dicho fenómeno.
3. Percepción del éxito y la competencia: Comparar los éxitos y los fracasos propios con los del resto de la gente puede desencadenar en una obsesión que, en algunos casos, llega a provocar la pérdida de confianza en uno mismo y la búsqueda constante de la perfección.

¿Cómo afecta a las personas el síndrome del impostor?

El síndrome del impostor es un fenómeno que se considera difícil de identificar, pero que puede afectar de manera decisiva al rendimiento de las personas empleadas en su lugar de trabajo. Los principales efectos negativos de este síndrome en el puesto de trabajo son:

1.    Perfeccionismo excesivo:

Las personas que son demasiado autoexigentes nunca están satisfechas con el resultado final de su rendimiento profesional, aunque sea objetivamente positivo. La frustración, el pesimismo y el rechazo son reacciones muy habituales de la gente muy perfeccionista ante los logros profesionales.

2.    Déficit de la autoestima:

Los profesionales que se sienten impostores en su puesto de trabajo suelen estar permanentemente pendientes del rendimiento de sus compañeros y compañeras, lo cual los lleva a las comparaciones continuas. La comparación suele estar relacionada con baja autoestima.

3.    Problemas de autoatribución:

Otra de las características de quienes sufren el síndrome del impostor es que atribuyen sus logros al entorno o a la suerte, en lugar de considerarlos consecuencia de su trabajo y dedicación.

4.    Déficit motivacional:

La falta de motivación es una causa que se da con mucha confianza entre los que sufren el fenómeno del impostor. Creen que no se merecen su puesto de trabajo o que van a durar poco tiempo en él.

5.    Aumento de la rumiación psicológica:

Nos referimos con “rumiación psicológica” al fenómeno que se produce cuando una persona no deja de darle vueltas a un mismo tema o un pensamiento determinado que le genera angustia.

6.    Evitación de retos:

Un indicador fiable de un caso de síndrome del impostor es el miedo al fracaso.

7.    Falta de asertividad:

Las personas que sufren este fenómeno suelen ser poco asertivas a la hora de dar su punto de vista o comunicar sus sentimientos.

8.    Afectación en las relaciones sociales:

Las relaciones sociales también se ven afectadas, ya que cada elogio o muestra de reconocimiento profesional es recibida de forma negativa por quienes sufren el trastorno del que estamos hablando.

9.    Afectación psicológica:

Todos los efectos que hemos mencionado anteriormente producen un desgaste emocional en las personas que padecen el síndrome de fraude, que daña su salud mental en general.

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